En un reciente estudio realizado por Ipsos, una destacada firma de investigación de mercado, los encuestados en Chile han destacado con el tercer mayor nivel de optimismo entre 30 países en sus proyecciones de que el año 2026 será mejor que 2025. Este optimismo se evidencia al observar que dos de cada tres chilenos (66%) creen que 2025 fue un año desfavorable para el país, una cifra que marca un mínimo en siete años desde el estallido social y los difíciles tiempos de la pandemia. Además, muchos ciudadanos muestran esperanzas de que las condiciones cambien favorablemente el año próximo, lo que sugiere un cambio en la percepción social y económica del país.
Las proyecciones económicas también son prometedoras, ya que Chile se posiciona como el segundo país con menos probabilidades de caer en recesión, con el 35% de los encuestados compartiendo esta preocupación, justo detrás de los Países Bajos. Una mayoría significativa, el 53%, establece que sus ingresos disponibles serán más altos en 2026. Sin embargo, la incertidumbre sobre la Inteligencia Artificial permanece, con un 66% de los chilenos creyendo que esta tecnología podría desplazar muchos empleos. A pesar de estas reservas, un 38% de la población tiene una visión positiva sobre las nuevas oportunidades laborales que podría generar la IA.
A nivel social, los riesgos de disturbios públicos parecen haberse reducido, con solo un 58% de los encuestados creyendo que habrá protestas masivas en 2026. Este indicador marca una baja significativa en comparación con años anteriores, especialmente tras el estallido social de 2019. Nicolás Fritis, Country Manager de Ipsos Chile, sugiere que este cambio en las expectativas podría estar ligado a la búsqueda de estabilidad y seguridad tras años de crisis y tensiones socioeconómicas. La llegada de un nuevo presidente en marzo de 2026 podría ser un factor determinante en satisfacer este deseo de cambio.
Las preocupaciones sobre la seguridad continúan pesando en las proyecciones de los chilenos. Un 47% de los encuestados siente que su barrio será menos seguro en el próximo año, una tendencia que sigue el patrón global. Además, el impacto del cambio climático es una preocupación compartida, con el 78% de la población anticipando un aumento en las temperaturas promedio para 2026. A pesar de que esta cifra ha disminuido en comparación con el año pasado, sigue reflejando una inquietud creciente por los fenómenos meteorológicos extremos, lo que indica que la ciudadanía está cada vez más consciente de los desafíos ambientales que enfrenta el país.
La encuesta de Ipsos, que involucra a más de 23,000 adultos de diferentes países, proporciona una visión valiosa sobre las expectativas de los chilenos hacia el futuro. Con la esperanza de que 2026 traiga mejores condiciones personales y económicas, el estudio revela un balance entre el optimismo y los desafíos que aún persisten en la sociedad chilena. A medida que el nuevo gobierno se prepara para asumir el mando, habrá una presión considerable para abordar las expectativas de la población y trabajar hacia un futuro más estable y prometedor.
