Una serie de grabaciones realizadas con cámaras corporales de Carabineros han salido a la luz, revelando el comportamiento del exteniente coronel Claudio Crespo y su equipo de Fuerzas Especiales durante el estallido social de 2019. Estos registros, a los que tuvo acceso el medio Ciper, fueron captados entre el 8 de noviembre y el 6 de diciembre, específicamente en los alrededores de Plaza Italia. Las imágenes muestran incidentes que incluyen amenazas directas, agresiones físicas e irregularidades en el uso de armamento antidisturbios, lo que ha levantado un enorme debate sobre el uso de la fuerza en contextos de protesta.
Uno de los videos más impactantes muestra a Crespo tomando del cuello a un joven que no presenta resistencia y, en un acto violento, le arranca un mechón de cabello. En otro, se le escucha amenazando a un detenido, expresando de manera explícita la intención de causarle daño. Estas grabaciones son fundamentales en el juicio que enfrenta a Crespo por apremios ilegítimos que resultaron en lesiones graves a Gustavo Gatica, quien perdió la vista tras recibir disparos de perdigones el 8 de noviembre de 2019.
Los videos, que forman parte integrante de la evidencia presentada en el juicio, no solo documentan las acciones de Crespo en situaciones de alta tensión, como el lanzamiento de piedras y bombas molotov hacia las fuerzas policiales, sino que también ilustran cómo se llevan a cabo respuestas policiales que infringen los protocolos establecidos. En un registro del 28 de noviembre, Crespo desoye el sufrimiento de un manifestante que se estaba incendiando, indicando que no le importaba y ordenando a sus subordinados que no informaran de la situación por radio.
La reacción del tribunal ante algunos de estos episodios ha sido preocupante. La jueza Cristina Cabello minimizó la importancia del famoso episodio del mechón de pelo, enfatizando que detenerse en este incidente es irrelevante para el caso. Por su parte, el abogado defensor optó por no comentar sobre los videos, argumentando desconocerlos. Sin embargo, las grabaciones evidencian un uso continuado y excesivo de la fuerza, lo que ha llevado al Colegio Médico a reportar múltiples casos de trauma ocular grave durante el periodo de la crisis social.
Ciper ha destacado que seis de los siete videos poseen una calidad de imagen y sonido suficiente para identificar claramente los diálogos y acciones documentadas. A pesar de que el gobierno y Carabineros anunciaron restricciones en el uso de escopetas antidisturbios a partir del 10 de noviembre de 2019, los registros muestran que las prácticas violentas y el abuso de poder no cesaron, evidenciando un patrón de conducta que pone en cuestión la formación y regulación de las fuerzas de seguridad ante manifestaciones públicas.













