En una explosiva publicación realizada este jueves en su red social Truth, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, arremetió contra Jerome Powell, actual presidente de la Reserva Federal (Fed). En un tono despectivo, Trump, quien ha mantenido una postura crítica hacia la Fed desde que ocupó el cargo, se refirió a Powell como «Jerome ‘Tardón’ Powell», y lo acusó de ser «demasiado estúpido y político» para liderar la institución encargada de regular la política monetaria del país. Esta declaración se produce en medio de una creciente presión sobre la Fed por parte de los líderes políticos y empresariales, quienes buscan una reducción de las tasas de interés ante el repunte del 3% en el PIB estadounidense.
La crítica de Trump se intensificó tras el anuncio el miércoles de que la Fed mantendría las tasas de interés sin cambios. En su afirmación, el expresidente argumentó que Powell no está tomando las decisiones correctas en un momento crítico y que su falta de acción está costando al país «trillones de dólares». Según Trump, la posición de Powell está llevando a Estados Unidos a una situación económica compleja que podría resultar perjudicial en el largo plazo. Este tipo de ataques no son nuevos en la trayectoria de Trump, quien ha cuestionado abiertamente la independencia de la Fed en varias ocasiones.
Uno de los puntos más controversiales que Trump mencionó en su crítica fue el costo de la renovación de las instalaciones de la sede de la Fed, que se estima en alrededor de 700 millones de dólares. El expresidente calificó esta operación como «una de las renovaciones de edificios más incompetentes y corruptas de la historia de la construcción», sugiriendo que la mala gestión de Powell ha desviado recursos importantes que podrían ser utilizados para otros fines. Esta afirmación ha resonado entre los republicanos, quienes están utilizando la situación para reforzar su narrativa sobre la ineficacia de la actual administração de la Fed.
Además del costo de las obras, Trump expresó su preocupación sobre el impacto que la política monetaria actual está teniendo en la economía de Estados Unidos. Afirmó que los estadounidenses están «pagando el precio» de tener a un presidente de la Fed que, en su opinión, no está capacitado para manejar las complejidades económicas del país. Las tensiones entre el expresidente y Powell reflejan una creciente división en cómo se perciben las políticas económicas y la dirección que debería tomar el país en un contexto mundial lleno de incertidumbres.
Las declaraciones de Trump provocan un debate crucial sobre el futuro de la política monetaria en Estados Unidos y la influencia política que debería tener sobre la Reserva Federal. Muchos economistas advierten que, aunque las tasas de interés son un tema delicado, la independencia del banco central es vital para la estabilidad económica. De cara al futuro, será fundamental observar cómo estas tensiones entre el ejecutivo y la Fed se desarrollan, especialmente en un contexto electoral donde la economía será un punto central de discusión.













