El ministro de Economía, Nicolás Grau, ha revelado su intención de mantener una reunión con la pesquera PacificBlu, que ha anunciado su inminente cierre debido a la implementación de la Ley de Fraccionamiento pesquero. Durante una entrevista en radio ADN, Grau enfatizó la importancia de abordar la situación de esta empresa, resaltando que la legislación pesquera actual está en un estado problemático y que su trámite no fue llevado a cabo con total transparencia. Esta situación ha generado preocupación tanto a nivel gubernamental como entre los afectados por el cierre, dado que la pesquera es un actor clave en la industria del Biobío.
La Ley de Fraccionamiento, que busca dividir los recursos marinos entre el sector artesanal e industrial, ha sido el centro del conflicto. Según Grau, el objetivo de la normativa es proveer un marco equilibrado que permita el coexistir de ambos sectores. «Se ha trabajado de manera muy transparente y ha generado amplios consensos en el Parlamento», afirmó el ministro. Sin embargo, la división del recurso, inicialmente propuesta en un 57% para la industria y 43% para el sector artesanal, fue modificada en la Cámara de Diputados, donde se planteó un 70% para los artesanales, lo que finalmente fue rechazado en el Senado, dejando la situación en un limbo legislativo.
Grau explicó que la preferencia por la pesca artesanal en la legislación ha sido una realidad influenciada por los legisladores de diversas regiones, quienes abogan por la protección del sector más pequeño. «Lo que hemos intentado desde el Ejecutivo es encontrar un equilibrio que permita que estos dos ámbitos coexistan», agregó, sugiriendo que los parlamentarios comprendían la importancia de la planta de PacificBlu para la economía local. Esta dinámica pone de relieve la complejidad de la regulación pesquera y la necesidad de construir puentes entre las diferentes necesidades del sector pesquero.
Ante la inminente posibilidad de cierre de PacificBlu, que afectaría a más de 800 trabajadores directos y a otros 2,400 de forma indirecta, el ministro Grau se muestra esperanzado. En la reunión próxima con los directivos de la empresa, espera que puedan expresar las condiciones bajo las cuales podría continuar operando. «Voy a hacer un esfuerzo para generar consensos políticos que favorezcan esas condiciones», afirmó, destacando su compromiso con encontrar una solución que beneficie a todos los involucrados.
La situación de PacificBlu representa un reto no solo para la agenda económica del país, sino también para la confianza en la legislación pesquera. Ante la presión creciente de los trabajadores y las comunidades afectadas, la capacidad del gobierno para mediar y facilitar un acuerdo será crucial. «Pienso que el anuncio de la empresa permitirá abrir un diálogo distinto, y confiamos en que juntos podamos encontrar una solución viable para todos», concluyó el ministro Grau, enfatizando la urgencia de la situación y la necesidad de una respuesta efectiva.














