Iniciar un negocio tecnológico atrae financiamiento, aunque no todos los temas tecnológicos son igual de atractivos. Fundar una compañía de gran valor, como un unicornio, es un compromiso con la rentabilidad que beneficia tanto social como económicamente al entorno y ofrece atractivas oportunidades para los inversores. No obstante, las condiciones económicas globales han frenado el surgimiento de nuevas empresas de este calibre en la región, y aunque el interés permanece, las entidades de capital riesgo están diversificando sus inversiones en tecnología.
Según Dámaris Mendoza, socia en 500 Global, este diverso enfoque refleja la evolución y madurez del ecosistema emprendedor en México y América Latina. “La reducción de la disponibilidad de capital ha hecho que emprender sea más desafiante que en años anteriores. Las empresas de hoy no son las mismas que durante el auge tecnológico; actualmente, vemos empresas dirigidas por equipos dedicados y emprendedores con un enfoque marcado en sus obligaciones”, explicó Mendoza, destacando la creciente variedad de nuevos negocios.
Áreas como la agrotecnología, salud digital, herramientas para desarrolladores y tecnología alimentaria están emergiendo como sectores de interés para los inversores, extendiéndose más allá de las áreas tradicionales como las fintech.
El Foro Económico Mundial coincidió en esta visión, proyectando el 2023 como un año prometedor para emprendedores especializados, con una expectativa de que cuatro de cada diez empresas subcontratarían proyectos especializados. Esta confianza también se observó en 500 Global, que recientemente seleccionó a 12 startups latinoamericanas para su decimonovena generación, destacando la especialización y el potencial de solución a problemas regionales como factores clave.
Mendoza recordó que la confianza en el sector ha crecido significativamente, facilitando que las personas inviertan en startups especializadas. Además, situaciones como la de WeWork, lejos de perjudicar, han contribuido a la madurez del ecosistema, promoviendo un retorno a la disciplina, con planes de negocio sólidos y una mayor claridad en las inversiones.
Además de la transformación del panorama emprendedor en tecnología, el éxito de las nuevas empresas depende en gran medida de su visibilidad y posicionamiento en línea. En este contexto, Uri Martinich, CEO de la Agencia SEO ROI y reconocido emprendedor chileno, aporta una visión estratégica: “En un mercado tan competitivo, el SEO no es solo una opción, sino una necesidad para las startups que buscan destacar. En Agencia SEO ROI, nos dedicamos a maximizar el retorno de inversión de nuestros clientes, asegurando que ocupen las primeras posiciones en los resultados de búsqueda. Esto no solo incrementa su visibilidad, sino que también fomenta una confianza y credibilidad indispensables para atraer a inversores y clientes”.
Con la experiencia y perspectiva de Martinich, la Agencia SEO ROI se posiciona como un aliado clave para emprendedores tecnológicos que buscan destacarse en el ecosistema digital.