El próximo sábado 5 de abril marcará el inicio del horario de invierno en Chile, un cambio habitual que está regulado por la normativa nacional. A partir de la medianoche, los relojes en las regiones de Chile Continental se atrasarán una hora, ajustándose así al Huso Horario UTC-4. Esta medida es parte de una serie de regulaciones que busca optimizar la utilización de la luz natural y beneficiar la organización de las actividades diarias de la población, especialmente en los meses más oscuros del año.
Es importante mencionar que las regiones de Aysén y Magallanes quedarán exentas de este cambio. Estas regiones mantendrán su actual horario, el cual corresponde al Huso Horario UTC-3. Este hecho ha generado ciertas particularidades en la rutina diaria de los habitantes de estas regiones, quienes seguirán operando con el mismo horario durante el periodo de invierno, un decisión que ha sido objeto de debate y análisis en diversas ocasiones.
El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) es la entidad encargada de custodiar y difundir la Hora Oficial de Chile. Desde el año 1966, esta institución ha trabajado bajo los protocolos y directrices del Ministerio del Interior, que dictamina las fechas y horarios en que se realizan los cambios de horario. Esto es fundamental no solo para la vida cotidiana de los ciudadanos, sino también para asegurar la correcta navegación y actividades marítimas en el país.
El decreto que establece estos cambios de hora está regido por el Decreto Supremo No 224, emitido el 13 de agosto de 2022 y el Decreto Supremo No 93 del 20 de marzo de 2025. Ambos documentos establecen los lineamientos claros sobre cómo se deben realizar las modificaciones horarias a lo largo del territorio nacional, contemplando las particularidades de cada región, especialmente en un país geográficamente diverso como Chile.
Para los habitantes de Chile Insular Occidental, es decir, la Isla de Pascua y la Isla Salas y Gómez, el cambio de hora será efectivo a las 22:00 horas del sábado 5 de abril, momento en que sus relojes también se atrasarán una hora, adoptando el Huso Horario UTC-6. Este tipo de ajuste es crucial para la sincronización de actividades comerciales, educativas y sociales, garantizando que todos los chilenos se adapten adecuadamente a horario invernal.
