Para abordar el desafío del estrés post-vacacional y facilitar el retorno gradual a las actividades laborales, Poliglota, la startup chilena enfocada en el aprendizaje de idiomas, ha instaurado el servicio conocido como ‘Día de Aterrizaje’. Este beneficio permite a los colaboradores reintegrarse a sus funciones sin la presión de reuniones ni tareas urgentes en su primera jornada después de las vacaciones. De acuerdo con una encuesta realizada por la Dirección del Trabajo, un alarmante 61% de los trabajadores en Chile vive altos niveles de estrés al regresar, situación que se agrava por la acumulación de tareas y la necesidad de recuperar el ritmo inmediato del trabajo.
Carlos Aravena, CEO de Poliglota, enfatizó la importancia de este beneficio, afirmando: ‘Queremos que nuestro equipo vuelva con energía, no con ansiedad. El descanso es clave para la creatividad y la productividad, y un mal retorno puede anularlo en minutos’. Este enfoque no solo busca dar un respiro a los empleados tras su regreso, sino también asegurar que ese descanso se traduzca en un mejor rendimiento a largo plazo. En un entorno laboral que a menudo prioriza la rapidez sobre el bienestar, iniciativas como esta marcan una diferencia significativa.
La problemática de la salud mental en el trabajo es innegable en Chile, donde, según datos del Instituto de Seguridad Laboral (ISL), los trastornos mentales constituyen el 37% de las licencias médicas. Esta estadística subraya la gravedad del estrés laboral, que se convierte en una de las causas principales de ausentismo. La ansiedad que acompaña el regreso al trabajo tras las vacaciones no solo afecta la salud, sino también la concentración, la motivación y, en consecuencia, la productividad de los trabajadores.
El ‘Día de Aterrizaje’ contempla una serie de medidas diseñadas específicamente para resguardar la salud emocional del equipo. Entre ellas se incluye un día sin reuniones, tiempo dedicado a la planificación personal, y flexibilidad en el horario laboral. Este enfoque permite a los empleados reacomodar su carga mental y adaptar su ritmo a las demandas del trabajo, evitando así la presión y el desánimo que a menudo acompañan el regreso a la rutina diaria.
Experiencias en países como Alemania y Suecia demuestran que la implementación de beneficios similares ha resultado en mejoras notables en la satisfacción y el rendimiento laboral de los empleados. Aravena concluyó: ‘Si queremos que las empresas sean productivas, primero debemos asegurarnos de que las personas estén bien. Este beneficio es una apuesta por el bienestar real, no solo por tendencias pasajeras’, reafirmando el compromiso de Poliglota con la salud y el bienestar de su equipo.














