Comienza agosto, un mes que está intrínsecamente vinculado con la celebración de la infancia. Este año, la Fundación Viento Sur, a través de su plataforma Cuidemos la Infancia, ha lanzado la campaña “Mi Primera Vez”, cuyo objetivo es llamar la atención sobre las consecuencias del uso excesivo y precoz de pantallas en los niños y niñas. Esta iniciativa busca no solo visibilizar esta problemática, sino también generar una profunda reflexión acerca del papel que deben desempeñar los adultos en la introducción de los menores al mundo digital. La campaña enfatiza la necesidad de un acompañamiento activo, afectivo y consciente por parte de los padres y cuidadores en la vida digital de los más pequeños.
El mensaje central de la campaña resuena con preocupación: “No aprendió esto de ti, lo aprendió en internet”. Esto pone de manifiesto un problema alarmante que ha ido en aumento en los últimos años: el acceso a dispositivos inteligentes como celulares y tablets, así como videojuegos, está comenzando a ser cada vez más común entre los niños, muchas veces sin supervisión ni contexto adecuado. El enfoque de la campaña es claro y urgente: debe priorizarse que las primeras experiencias de los niños sean compartidas con adultos significativos en lugar de frente a una pantalla sola. Lucy Ana Avilés, presidenta del directorio de la Fundación Viento Sur, destaca que «la infancia se vive solo una vez, y cada momento que se pierde frente a una pantalla no se recupera».
Fundada sobre una propuesta de estudiantes de publicidad de la Universidad del Desarrollo, quienes participaron en el festival internacional “La Pieza”, la idea de la campaña surgió de la inquietud de Amaru Arenas y Maximiliano Sanz sobre la denominada “Hipertensión Informática”. A medida que investigaban, se dieron cuenta de que el problema no residía en los niños, sino en los padres, quienes les otorgaban acceso muy temprano a una realidad digital complicada. Con un 67% de niños entre 5 y 12 años poseyendo su propio dispositivo móvil y un tiempo promedio de más de 4 horas diarias frente a pantallas, la situación requiere atención inmediata.
El entorno digital puede ser abrumador para los niños, ya que muchos de ellos enfrentan sus primeras experiencias tecnológicas en soledad, lo que puede resultar en una falta de orientación y límites. Lucy Ana Avilés señala que «como sociedad, tenemos el deber de acompañar mejor esos momentos», insistiendo en que educar en la era digital, aunque desafiante, es posible si se enfoca en las habilidades parentales y en crear espacios de tiempo compartido entre adultos y menores.
La campaña “Mi Primera Vez” no tiene la intención de culpar a los padres, sino invitar a una reconexión con lo esencial: el juego, la presencia y el vínculo emocional. Avilés concluye que hay que celebrar a los niños desde un enfoque positivo: “Queremos que esta campaña conecte con el amor, no con la culpa. Celebrar a los niños también es decirles ‘sí al juego, sí al movimiento, sí al cuidado’. Y eso parte por nosotros, los adultos”. Para más información y recursos gratuitos, la Fundación Viento Sur invita a las familias a visitar www.cuidemoslainfancia.cl.














