Durante el pasado viernes 9 de mayo, el abogado Luis Mariano Rendón, representante del grupo ciudadano «Ñuñoa por Palestina», utilizó su cuenta de X para desmentir informaciones publicadas por medios locales como Emol y La Tercera. Estos reportes afirmaban que la Municipalidad de Ñuñoa había desistido del cambio de nombre de la calle República de Israel, una medida que busca restablecer la designación histórica de «Nueva Ñuñoa». Según Rendón, la comuna no ha dado marcha atrás en esta iniciativa, aunque insinuó que al alcalde pro-sionista Sebastián Sichel sí le gustaría que fuera así. El abogado indicó que la modificación fue aprobada previamente por el Consejo Comunal de Organizaciones de la Sociedad Civil (COSOC) y ratificada por el Concejo Municipal.
En una serie de afirmaciones contundentes, Rendón criticó al alcalde Sichel, acusándolo de no cumplir con su obligación de oficializar el cambio de nombre mediante un decreto. En lugar de esto, el alcalde optó por presentar una consulta a la Contraloría General de la República, lo que, según el abogado, es una táctica para retrasar el proceso. «El acuerdo ya está tomado y lo que corresponde ahora es ejecutarlo», expresó con firmeza, enfatizando que las decisiones democráticas deben ser respetadas y llevadas a cabo sin dilaciones innecesarias.
Cabe recordar que la propuesta de cambiar el nombre de la calle fue inicialmente impulsada por la exalcaldesa Emilia Ríos, del Frente Amplio, después de recibir solicitudes de agrupaciones pro-palestinas en el contexto del conflicto en Medio Oriente. En esa primera fase, el Concejo Municipal respaldó la medida, motivada por la percepción de un «genocidio» por parte de Israel en Gaza. Sin embargo, con la llegada del nuevo alcalde Sichel, el proceso se detuvo y se decidió realizar una consulta ciudadana para conocer la opinión de los vecinos de la calle en cuestión.
Desde la Municipalidad de Ñuñoa, cuando se contactó a la administración para verificar la versión de Rendón, se confirmó que el cambio de nombre del calle se encuentra en «suspensión indefinida». Además, se publicaron los resultados de la consulta vecinal, que muestran una clara mayoría en contra de la modificación. De 142 encuestas realizadas, 132 fueron válidas, de las cuales el 73,48% se manifestaron en desacuerdo con el cambio de nombre, en comparación con un 21,97% que lo apoyó.
Luis Mariano Rendón ha cuestionado la validez de esta consulta, argumentando que la ciudadanía ya había participado de manera formal al recolectar cientos de firmas verificadas por la municipalidad y a través de una audiencia pública ante el Concejo. A su juicio, la encuesta realizada por funcionarios de la alcaldía carece de garantias de imparcialidad y no tiene valor jurídico para anular el proceso legítimo que ya había tomado lugar. En este sentido, instó a las autoridades a respetar la voluntad de la ciudadanía y a ejecutar el acuerdo que fue aprobado democráticamente.














