El secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, se expresó este domingo sobre la reciente victoria electoral de José Antonio Kast, el nuevo presidente electo de Chile. En su declaración, Rubio destacó la importancia de establecer una colaboración estrecha entre los Estados Unidos y la administración de Kast, indicando su confianza en que Chile, bajo el liderazgo de Kast, priorizará temas cruciales como el control de la inmigración ilegal y la mejora de las relaciones comerciales entre ambos países.
Rubio elogió los resultados de las elecciones, donde Kast se impuso a la candidata de izquierda Jeannette Jara con un contundente 58,1 % de los votos, según datos preliminares del Servicio Electoral (Servel). Esta victoria no solo marca un hito en la historia política chilena, sino que también indica un cambio significativo hacia políticas más conservadoras en un país que había estado dividido entre la izquierda y la derecha en los últimos años.
La victoria de Kast es notable, ya que logró imponerse en todas las regiones del país, incluyendo tradicionales bastiones de la izquierda como Valparaíso y la Región Metropolitana, que alberga la capital, Santiago. Este amplio margen de triunfos le convierte en el segundo presidente electo con la mayor diferencia desde el retorno a la democracia en Chile, lo que podría presagiar un cambio significativo en la política nacional hacia un enfoque más conservador.
Kast, conocido por sus posturas ultraconservadoras y por ser un ferviente católico, ha prometido enfocar sus esfuerzos en la revitalización de la economía y la seguridad pública. Con la toma de posesión programada para el 11 de marzo, se espera que su administración implemente rápidamente sus políticas sobre inmigración y comercio, temas que Rubio ya ha mencionado como prioridades compartidas para fortalecer los lazos entre Chile y Estados Unidos.
La transición de poder entre Kast y el actual presidente Gabriel Boric, quien lideró un gobierno de centroizquierda, promete ser un momento crucial para Chile. La amplia victoria de Kast no solo representa un cambio en la dirección política del país, sino también un reto para la oposición, que deberá recalibrar su estrategia en un panorama político que se mueve hacia la derecha. Con el respaldo de la administración estadounidense, se anticipa que Chile podría embarcarse en reformas significativas que afecten tanto a la economía como a la seguridad nacional.














