El mercado inmobiliario chileno atraviesa un momento excepcional que favorece a quienes buscan adquirir una vivienda. Con la implementación de un nuevo subsidio estatal que ha reducido significativamente las tasas de interés, se presenta una combinación ideal para potenciales compradores. Además, las inmobiliarias están ofreciendo atractivas promociones para la entrega inmediata de propiedades, como respuesta a un inventario elevado. David Muñoz, CEO de Creditú, destaca que actualmente existe una «triple oportunidad» que compone un contexto sin precedentes para la adquisición de viviendas, donde las tasas subsidiadas, precios competitivos y las opciones de financiamiento para el pie hipotecario se combinan de manera beneficiosa.
Sin embargo, a pesar de estas circunstancias favorables, un obstáculo persistente se cierne sobre muchas familias chilenas: la dificultad de reunir el ahorro necesario para el pie hipotecario. Muñoz subraya que, según datos de Creditú, una familia promedio en Chile requiere más de 10 años para acumular el 20% que exige el sistema bancario. Esta prolongada espera se ha convertido en un cuello de botella que frena el acceso a la vivienda propia. Frente a esta realidad, las soluciones innovadoras son imprescindibles para facilitar el proceso de compra.
Una respuesta concreta llega de la mano de Creditú, que ha implementado un sistema para financiar el pie hipotecario en cuotas sin interés y con plazos extendidos de hasta 60 meses. «Esta modalidad permite que las familias accedan a su hogar sin necesidad de esperar años para reunir el ahorro correspondiente», señala Muñoz. Esta propuesta ha permitido que más de 3.000 familias concretaran la compra de su primera vivienda, mostrando así la efectividad de la estrategia y su impacto en el sector.
El beneficio de esta herramienta no solo se traduce en facilitar el acceso a la vivienda, sino que también genera un impacto económico significativo para las familias y el mercado inmobiliario. Se estima que estas herramientas han permitido un ahorro combinado superior a $150 mil millones en arriendos evitados. Para las inmobiliarias, esto representa ventas por más de 250 millones de dólares, lo cual refuerza la vitalidad del sector en un momento donde las condiciones del mercado se presentan como favorables.
No obstante, Muñoz advierte que esta ventana de oportunidad no estará abierta indefinidamente. Con un número limitado de subsidios y una tendencia al alza en las tasas de interés, así como la rápida venta de las mejores unidades, el mensaje para los interesados es claro: actuar ahora. Es fundamental cotizar, comparar tasas, dialogar con inmobiliarias y considerar las alternativas de financiamiento disponibles. «La oportunidad está presente, quienes posterguen la decisión pueden perder esta chance única», concluye Muñoz.













