Karen Palma, vicepresidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), ha hecho un enérgico llamado a la movilización para el próximo 1° de mayo en la Alameda, donde se llevará a cabo un acto central que incluirá la presentación de una cuenta pública sobre los desafíos sindicales para 2024. Palma enfatizó la necesidad de «mostrarnos en las calles», destacando la importancia de la participación activa de los trabajadores en la defensa de sus derechos. Además, el evento contará con la participación artística de la Sonora Malecón, lo que promete un ambiente festivo junto con la reivindicación de demandas laborales esenciales. Este día simboliza no solo la celebración del Día del Trabajo, sino también la lucha continua por mejores condiciones laborales en Chile.
En el contexto de la salud pública, Palma, quien también es vicepresidenta de la Fenats, criticó la falta de avance en la implementación de una carrera funcionaria que contemple aumentos salariales por antigüedad y beneficios al momento de pensionarse. En declaraciones a Radio Nuevo Mundo, resaltó que «quedan pocos meses para que el gobierno cumpla su programa», exigiendo un compromiso real para abordar las necesidades de un sector que ha sido históricamente postergado. Asimismo, denunció el alarmante aumento de agresiones contra trabajadores de la salud en postas y servicios de urgencia, llamando a la creación de iniciativas que mejoren la comunicación y contención con los pacientes y sus familias.
En el ámbito político, Palma hizo un llamado a la unidad progresista ante el avance de la derecha y la ultraderecha en el panorama electoral global, advirtiendo que estos movimientos están llevando a retrocesos significativos en los derechos laborales. Durante su intervención, instó a crear un bloque político-social antifascista, afirmando que «no basta con oponerse; hay que disputar espacios donde hoy tiene eco la derecha». Este llamado se enmarca en la necesidad de construir un frente común que abogue por la defensa de los derechos laborales y sociales, en un momento donde las elecciones se perfilan como un terreno crucial para definir el futuro del país.
Palma también aludió a recientes declaraciones polémicas de figuras políticas como Evelyn Matthei, quien minimizó los crímenes de la dictadura, subrayando la importancia de no repetir los errores del pasado. «La historia nos enseña a no permitir que se banalicen los sufrimientos y violaciones a derechos humanos», afirmó, reiterando que la CUT trabajará para que las demandas de los trabajadores estén en el centro del debate electoral. Este enfoque es fundamental para prevenir que la narrativa política regrese a espacios de intolerancia y negación, elementos que en su opinión deben ser contrarrestados con una movilización social activa.
Finalmente, la vicepresidenta de la CUT cerró su intervención enfatizando que este 1° de mayo no solo se debe convertir en una jornada de celebración, sino en una oportunidad para reafirmar el compromiso de los trabajadores con la justicia social. Con la consigna de hacer de la marcha un evento masivo y representativo, Palma llamó a todos los sectores del trabajo a unirse en esta lucha común. «El desafío es grande, pero nuestra fuerza también lo es», concluyó, invitando a todos a participar y recordar que la unión es clave para lograr cambios significativos en las condiciones laborales y sociales del país.














